Si ya la sola idea de tener que tragarse publicidad por el simple hecho de cambiar de canal es aberrante, también hay que sumarle el problema que esto está provocando indirectamente en el servicio. Ahora, al cambiar de canal también hay un considerable retardo de unos 2 o 3 segundos antes de empezar a poder ver el nuevo canal, independientemente de si lo que vas a recibir es la señal del canal o el infame anuncio correspondiente. Y esto sucede SIEMPRE. Si cambias 10 veces, te tragas 10 retardos. Lo curioso es que esto no sucede con todos los canales, aunque sí con la mayoría. Es decir, todo apunta a que están preparando que, en un futuro no muy lejano, no sólo los canales de RTVE se tengan que sintonizar con publicidad previa sino que serán otros muchos más. La parte buena de esto es que todos los abonados que aún no se hayan dado de baja en esta primera oleada, terminarán haciéndolo cuando el servicio sea sencillamente insufrible.
Cada del servicio lo utiliza de la forma en que quiere hacerlo. Yo, por ejemplo, cambio muy a menudo de canal, por lo que al cabo del día puedo acabar tragándome muchísimos anuncios sólo por utilizar de forma normal un servicio por el que pago más de lo que vale. Porque, aparte de que "un anuncio máximo cada 30 minutos" es acoso, lo de que sean 5 como máximo al día es absolutamente falso. Probadlo si queréis: apagad el deco durante más de 15 segundos 6 veces el mismo día. Resultado: os habréis comido 6 anuncios al volver a encenderlo. A eso sumadle los que os hayáis comido al cambiar a la 1 o la 2, por ejemplo.
En resumen: el servicio es cada día peor y más caro. Y el problema es que a ellos les da igual porque al final no se da de baja tanta gente y pueden recuperarse de los que se van subiéndole la tarifa a los gi*******as que nos hemos ido quedando. La cuestión es que los cambios que ha habido hasta ahora podrían ser más o menos polémicos. Este cambio hace que el servicio deje de ser el mismo que había hasta ahora y lo convierte en algo incómodo de utilizar. Y esto sí va a provocar más bajas de las que han provocado otros cambios anteriores. Yo, en este momento, voy a quedarme. Pero poco tiempo. El tiempo suficiente para que el servicio por el que pago una pasta vuelva a ser el que era. Lo que me da más pena de todo es que, por muchos que nos vayamos, estos señores descerebrados que sólo quieren ganar dinero por encima de todo y de todos, y a costa de todo y de todos, no van a cejar en su empeño de cargarse un servicio con el que mucha gente estaba, cuando menos, conforme. Claro que igual todo esto es para atesorar más dinero para comprar VF o vete a saber cuál otra... Y, dado que los beneficios de esa compra se la van a llevar los accionistas, que sean ellos los que la sufraguen.
Así que me temo que al final dejaré de ser uno de los asteriscos de antes. Digi, calienta que sales.
